Navarra, no te lo pierdas

Antes de comenzar el Camino de Santiago conviene conocer cuáles son los lugares de interés especial, los que no podemos pasar por alto, para no perderse detalle de todos los tesoros que nos ofrece el recorrido original. Creedme si os digo que no pocos peregrinos, después de su regreso a casa, no han oído ni hablar de cantidad de joyas que nosotros hemos disfrutado durante el viaje. Para ello me limitaré a seguir el orden de poblaciones y lugares que nuestras etapas van a recorrer, con el fin de no tener que desviarse, salvo en muy contadas ocasiones, y durante un corto espacio de distancia y tiempo. Cuando volváis, y repaséis en vuestra intimidad cada recuerdo, cada sensación vivida, me lo agradeceréis. No hay mejor forma de impregnarse de la magia del Camino que sentirse dentro de él.

ORREAGA / RONCESVALLES
Población de una veintena de habitantes, encontramos dos maravillas: la Real colegiata de Santa María (s. XIII) y la capilla de Santiago (s. XIV).
A los pies del puerto de Ibañeta, donde el Pirineo Occidental comienza a elevar sus cimas y cerca de la amplia llanura de Burguete, se sitúa Roncesvalles, paso natural del Pirineo donde tuvo lugar la Batalla de Roncesvalles (778), una de las más dolorosas derrotas del ejército franco en la que Carlomagno lloró la muerte de Roldán, el mejor caballero de Francia.
La histórica derrota de Carlomagno y el Camino de Santiago hicieron memorable a Roncesvalles, cobijo de caminantes y peregrinos, foco de leyendas y encuentro de culturas. Los sólidos muros de la colegiata les protegerán del hostil invierno y les trasladarán a un mundo de batallas y mitos.
Lugar de paso donde se concentra historia y leyenda, Roncesvalles es un bello paraje forestal ubicado en el Pirineo navarro, que ocupa cerca de mil hectáreas y que es el punto mayoritariamente elegido por los peregrinos para iniciar el Camino de Santiago en España.
Real Colegiata de Santa María
Real Colegiata de Santa María - Roncesvalles
En un paisaje circundado por hayedos, abetales y robledales, se alza majestuosa la Colegiata de Santa María de Roncesvalles, antiguo hospital de peregrinos y uno de los puntos más conocidos de la peregrinación compostelana.En ella se respira una paz especial. Se acoge a los peregrinos y se les desea un buen camino. Aquí se celebra diariamente la misa de los peregrinos, de lunes a viernes a las 20:00, y los sábados y domingos a las 19:00 horas, con bendición del preregrino en todos los idiomas.
Colegiata de Santa María


Bendición del peregrino

Santa María de Roncesvalles
Todo el conjunto monumental de la Colegiata de Roncesvalles, donde se encuentra la tumba del rey Sancho VII el Fuerte, es un excelente ejemplo de arquitectura medieval, un espacio mítico.
Roncesvalles - Valle
La Colegiata fue construida a finales del siglo XII y principios del XIII. La explanada de acceso nos conduce hacia la Casa Prioral y el Museo Biblioteca para después, a través de un pequeño túnel de bóveda rebajada, acceder a las principales construcciones.
La restaurada iglesia colegial de Santa María, consagrada en 1219, responde al estilo gótico francés y cuenta con una torre defensiva del siglo XIV. Su altar mayor está presidido por la imagen de Santa María de Roncesvalles (XIV), una talla gótica de madera revestida con plata que, según la leyenda, apareció milagrosamente por el anuncio nocturno de un ciervo en cuyas astas brillaban dos luceros.
Del lado de la epístola se accede al claustro, construido en el siglo XVII tras el haberse derrumbado en 1600, tras una gran nevada, el primitivo claustro gótico. Desde allí, se llega a la capilla de San Agustín, en cuyo centro se encuentra el sepulcro del rey Sancho VII el Fuerte. Observe las mazas y
cadenas que se exhiben en su cabecera. Son las que, según la leyenda, el monarca arrebató al moro Miramamolín durante la contienda de las Navas de Tolosa (1212), que también se relata en las vidrieras de la iglesia, y que forman parte del escudo de Navarra.
Cadenas de Miramamolín
Mazas
El edificio más antiguo es la capilla del Sancti Spiritus o silo de Carlomagno (XII), de estilo románico. La construcción está asentada sobre una cripta con cubierta de cañón, donde dicen que clavó su espada Roldán tras la derrota.
Este mágico entorno se completa con otras construcciones como la iglesia de Santiago (S. XIV, pequeña y sencilla capilla gótica con retoques en el s. XX, también llamada de los Peregrinos, y edificios civiles como el antiguo hospital, construido entre 1802 y 1807, o el museo-biblioteca, que data de finales del siglo XIX.
Iglesia de Santiago y silo de Carlomagno
En él se puede admirar algunos de los tesoros artísticos acumulados en Roncesvalles a lo largo de la historia, como el Ajedrez de Carlomagno, un relicario de plata dorada y
Ajedrez de Carlomagno y relicarios
esmaltada considerado una de las mejores obras de la esmaltería medieval; la Virgen del Tesoro (XIV); o un evangeliario románico de plata. Igualmente, visite la Casa de los Beneficiados (XVIII) o la casa Itzandegia, primitivo hospital considerado mucho tiempo el primer santuario de la Virgen.



BURGUETE  
Iglesia de San Nicolás de Bari .La fachada que vemos es de estilo renacentista (s. XVII).


Iglesia de San Nicolás de Bari - Burguete
ESPINAL  
Iglesia parroquial de San Bartolomé (s. XX). Tiene este curioso techo tan inclinado para poder soportar las nevadas invernales. Las cristaleras laterales favorecen la entrada de luz al interior. También es el albergue municipal de peregrinos.
Iglesia de San Bartolomé - Espinal

ZUBIRI (significa "el pueblo del puente" en euskera). 
Zubiri, en sus orígenes, estaba formado por el núcleo existente entre el Puente de la Rabia y la Iglesia de San Esteban, extendiéndose a lo largo del camino-carretera, lo que permite hacerse una idea de la importancia de este puente. Junto a él, y al borde de la ruta jacobea, estaba el hospital de Santa Magdalena. La iglesia fue utilizada durante la guerra carlista como cuartel y resultó destruida en 1836 durante la contienda.
Iglesia de San Esteban Protomártir, que sustituye al recinto original destruido en la guerra carlista.
Iglesia de San Esteban Protomártir - Zubiri
Puente de la Rabia. Es un puente medieval sobre el río Arga. De estilo gótico, de 2 ojos de medio punto y tajamares poligonales. Existía la creencia de que los animales que daban una vuelta alrededor del pilar sanaban de la rabia. Dicen también que en uno de esos pilares del puente se encuentran enterradas las reliquias de Santa Quiteria. Además, algunos aseguran que podría tratarse del mítico "Puente del Paraíso".


Zubiri - Puente de la rabia
Huerta en Zubiri
Pamplona
Puente medieval de la Magdalena Este puente presenta el mismo estilo que el de Puente la Reina y por eso su base nos indica que en su origen pudo ser románico. Parece que los iniciales arcos de medio punto fueron sustituidos por los apuntados. Después del de San Pedro, se trata del  más antiguo sobre el río Arga. Ha experimentado diversas reformas a lo largo de los siglos. La obra más reciente se abordó en 1963, en que se restauró su aspecto original. Emplazado en el barrio del mismo nombre, constituye la entrada principal a la ciudad para los peregrinos que realizan el Camino de Santiago. Es el puente más popular y el más hermoso. En 1939 fue declarado monumento histórico-artístico.
Puente de la Magdalena - Pamplona
Rincón del caballo blanco Este es sin duda uno de los rincones con más encanto de la ciudad, un bello lugar para el paseo junto a la Plaza de San José y la Catedral. Constituye la parte más alta del Bastión del Redín, donde se levantaba antiguamente un palacio del que sólo se conserva la Cruz del Mentidero, lugar de ejecuciones que data de 1500.
Las vistas son consideradas como las mejores de la ciudad, se pueden ver los barrios de la Rochapea, Chantrea y San Jorge, y al fondo el monte San Cristóbal con su fuerte abandonado en la parte más alta.
Rincón del Caballo Blanco
El Bastión del Redín Se consideraba el mejor punto defensivo de la ciudad y el más inaccesible de todo el complejo amurallado. Al tener una forma estrellada con tres puntas, los cañones podían cubrir todos los ángulos de tiro. En cada extremo de la estrella hay una garita de diseño renacentista, iguales que las de la Ronda Barbanzana.
Durante los siglos XVI y XVII la muralla se reforzó con nuevas construcciones; había que adecuar el aparato defensivo a los nuevos tiempos y aparatos bélicos. Así, a los pies del bastión se excavaron fosos y se levantaron nuevas fortificaciones, como el Baluarte Bajo de Guadalupe, y más abajo aún, se encuentra el Revellín de los Reyes, una fortificación triangular cuya misión es dividir a la fuerza atacante y proteger los muros mediante un fuego cruzado. Antiguamente se ubicó aquí una hospedería de peregrinos y hoy es un establecimiento de hostelería. Su nombre era el de una antigua posada de la calle Mayor. El actual edificio fue levantado en los años 60 con los restos del palacio medieval de Aguerre, que fue derruido en la calle Nueva. En la terraza exterior del mesón se pueden disfrutar conciertos al aire libre en verano.
Por su proximidad al Camino de Santiago, que entra a la ciudad por el Portal de Francia y sube por la calle del Carmen, es un lugar muy frecuentado por los peregrinos, que se toman aquí un merecido descanso.
Bastión del Redín
Catedral de Sta. María la Real, en el barrio de la Navarrería, punto más alto y más antiguo de la ciudad. De origen románico, fue reconstruida en el s. XIV en estilo gótico.  La fachada principal es neoclásica y se añadió a finales del s. XVIII.
La Catedral de Santa María es el monumento más emblemático de la ciudad y el que más tesoros histórico-artísticos conserva. Construida durante los siglos XIV y XV en el solar donde antes hubo un templo románico y aún antes se asentaba la Pompaelo romana. Detrás de su fachada neoclásica, se esconde un templo gótico sobrio, inspirado en el francés de la Seo de Bayona. La joya principal es el claustro, y una de las cumbres universales del estilo gótico. Construido entre 1286 y 1472, pocos claustros existen en Europa de su categoría.
Catedral de Santa María la Real - Pamplona
Cada uno de sus cuatro costados está jalonado por seis maravillosos arcos ojivales cuyas tracerías juegan evocadoramente con la luz sobre la piedra. Por encima, el sobreclaustro; en medio, un pequeño jardín. Las cinco portadas componen el conjunto escultórico más importante del recinto.
Además, 46 de las 56 claves de las bóvedas del claustro están decoradas con relieves figurados. Simbolizan el mundo de la creación: los ríos del Paraíso en las esquinas, los vientos marcan los puntos cardinales en las bóvedas centrales, y completando la alegoría, las ocupaciones del año.

Claustro de Santa María la Real - Pamplona

El Claustro es un pequeño museo que muestra la evolución de la escultura monumental y decorativa gótica, desde el siglo XIII (los primeros capiteles del ala este), hasta el último tercio del XIV. El repertorio decorativo e iconográfico es riquísimo, especialmente en los capiteles. No se limita a temas religiosos sino que se incluyen escenas cotidianas y populares y expresiones de lo imaginario.
Iglesia de San Saturnino o San Cernín Construida inicialmente en estilo románico, pero reedificada a finales del XIII en estilo gótico. Atrio de la fachada principal con arcos ojivales del s. XVI. En ella se encuentra la capilla de la Virgen del Camino, patrona de Navarra.
Iglesia de San Saturnino - Pamplona
Plaza del Castillo  Desde su construcción la plaza se convirtió en el centro neurálgico de la vida social pamplonesa y en uno de los iconos más reconocibles de la ciudad, siendo hoy en día todavía escenario de importantes acontecimientos de la misma, por lo que suele ser habitual referirse a ella como "el cuarto de estar" de todos los pamploneses.
La Plaza del Castillo se ubica al sur del casco antiguo de Pamplona entre los antiguos burgos medievales de San Nicolás y La Navarrería y sirve de nexo de unión entre la zona antigua y la parte nueva de la ciudad conocida como Segundo Ensanche
La plaza se configuró urbanísticamente entre los siglos XVI y XVII.
Plaza del Castillo
Calle Estafeta La calle Estafeta es, sin duda, la calle más famosa de Pamplona, mundialmente conocida porque por ella pasan los encierros de los Sanfermines.
Su nombre le viene porque en el siglo XIX estuvo aquí la primera estafeta de correos de Pamplona.
Entre la estrechez de su calzada, y la alfombra de adoquines que dibuja su suelo, se esconde buena parte de la historia cotidiana de Pamplona. Repleta de bares donde se dan cita todas las generaciones de pamplonicas y visitantes, no se puede marchar uno sin darse un homenaje en forma de pinchos, bien regados eso sí, con un buen vino navarro.
Pinchos en la Calle Estafeta y aledaños
Zariquiegui Al poco de salir de Pamplona y al comenzar a subir al Alto del Perdón encontramos una preciosa portada románica perteneciente a la sencilla y  coqueta iglesia de San Andrés.
Iglesia de San Andrés - Zariquiegui
OBANOS La bella, enigmática y solitaria Santa María de Eunate de estilo románico. Sobre la que tanto se ha escrito y de la que se desconoce el porqué de su peculiar forma constructiva (octogonal con lados desiguales), ni su presencia en este lugar apartado, ni su función exacta. Su contemplación es obligada. Está situada en pleno campo de cereal, y para llegar a ella no hay que llegar hasta Obanos. Antes, a la entrada de Muruzábal, el camino pasa por un cruce dentro del puebo que indica perfectamente el desvío del camino hasta Santa María de Eunate. Está a unos 2,5 km del pueblo, por lo que no hay excusas para perdérsela. Y una vez estado allí, se sigue la carretera comarcal junto a la iglesia, hasta Puente la Reina, pasando esta vez si, por debajo de Obanos.
Santa María de Eunate - Obanos
Puente la Reina Población de gran tradición en el camino. En ella encontramos varias iglesias de las que destacaremos dos, ambas situadas en la Calle Mayor: la Iglesia del Crucifijo (Lo curioso del crucifijo es la forma en "Y" que presenta.) y la Iglesia de Santiago el Mayor (En el interior se custodia una de las tallas góticas más famosas de Santiago, conocido como Beltza (el Negro) debido a estar cubierta de hollín cuando fue encontrada).
Iglesia del Crucifijo
Iglesia de Santiago el Mayor
Iglesia de Santiago el Mayor - Portada
Puente románico El puente que da lugar al nombre de la población, donde confluyen los dos caminos que vienen desde Francia. El puente románico sobre el río Arga fue mandado construir en el siglo XI por una anónima reina de Navarra para facilitar el paso del río a los peregrinos. Generalmente se hace referencia a que esta reina fue Doña Mayor, esposa de Sancho el Mayor o Doña Estefanía, mujer de García el de Nájera. Imposible perdérselo, porque para salir de la localidad por el camino original hay que cruzarlo necesariamente.

Puente románico de Puente la Reina
Estella  Nacida por y para la peregrinación en el siglo XI y en la que destacaremos San Pedro de la Rúa, la de San Miguel, y el Santo Sepulcro, de entre un numeroso patrimonio artístico.
San Pedro de la Rúa (S. XIII). La portada presenta similitud con la de Santiago de Puente la Reina. Alberga en su interior un precioso claustro románico del que sólo se conservan dos tramos y que sirvió de cementerio de peregrinos.
San Pedro de la Rúa - Estella
Iglesia de San Miguel (S. XII), situada en el alto de La Mota en el antiguo burgo de su nombre.
Iglesia de San Miguel - Estella
Iglesia del Santo Sepulcro  Está situada en la antigua Rúa de los Peregrinos, actual calle de Curtidores, y es una de las parroquias antiguas de la ciudad. Consta que ya en 1123 era sede de la cofradía del Santo Sepulcro. Su fábrica muestra huellas de un largo proceso constructivo, iniciado en el románico y no concluido hasta el siglo XVI. En 1881 dejó de ser parroquia.
Iglesia del Santo Sepulcro
LOS ARCOS  La siguiente iglesia que nos deslumbra por su magnificencia y nos remansa, la encontramos en la pequeña localidad de Los Arcos. Es la monumental iglesia de Santa María que data del siglo XII, pero que fue añadiendo a lo largo de los siglos distintos elementos de los diferentes estilos que siguieron al románico: góticos, renacentistas, barrocos y neoclásicos. Su claustro adosado en estilo gótico flamígero (S. XV) es especialmente interesante, así como su retablo mayor, presidido por una talla gótica de Santa María de los Arcos. En ella se produce un fenómeno lumínico similar al de San Juan de Ortega por el que poco antes del solsticio de verano la imagen queda iluminada por única vez en el año. Destaca el campanario de Santa María (S. XVI) con elementos góticos y renacentistas, y el rico retablo mayor.
Iglesia de Santa María - Arcos
TORRES DEL RIO  Iglesia octogonal del Santo Sepulcro de Torres del Río. Es del S. XII, de planta octogonal, imitando el Santo Sepulcro de Jerusalén. Destaca en su interior la bóveda de nervios entrecruzados que recuerdan el arte hispanomusulmán. Se le atribuye origen templario.
Iglesia del Santo Sepulcro - Torres del Río
VIANA   
Iglesia de Santa María, del S. XIII, la portada es renacentista de estilo gótico, aunque con posteriores añadidos de otros estilos. Bajo el atrio de esta portada se encuentra enterrado bajo una sencilla lápida, César Borgia.
Iglesia de Santa María de Viana
Iglesia de San Pedro   Aunque la iglesia de San Pedro, del siglo XIII, se halla en ruinas, permanecen en buen estado su portada barroca del siglo XVIII, con una hornacina que alberga la imagen de San Pedro, y el antiguo cementerio, convertido en parque. Se disfruta desde allí de una impresionante panorámica de los muros medievales y de las tierras riojanas y alavesas. 
Iglesia de San Pedro - Viana



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