El Misterio de Obanos, como así se conoce la obra, ha sido declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional. La leyenda medieval nos cuenta el viaje que emprendió el joven duque Guillermo de Aquitania junto a su hermana Felicia en peregrinación hacia Santiago.
A su paso por Obanos, ella decidió quedarse para entregar su vida ayudando a los peregrinos que atravesaban esas tierras. Guillermo, celoso y envuelto en ira, trató de arrancar a su hermana de ese lugar. No consiguió convencerla y, en un arranque de furia, dio muerte a Felicia. El duque, sumido en la tristeza y el arrepentimiento, se recluyó en la ermita de Arnotegui, en el monte Arnótyegui, próximo a Obanos, tras haber completado el Camino de Santiago llorando su pena. Más tarde será San Guillermo y la ermita se dedicará a su nombre.

La historia se convirtió en un auténtico auto sacramental en 1965 bajo la tutela de su mentor, el sacerdote Don Santos Beguiristáin. Esta representación dramática de carácter alegórico se escenifica en la Plaza de los Fueros de Obanos, y cuenta con la intervención de más de 600 personas.